jueves, 7 de abril de 2022

ELECCIONES EN LA GANADERÍA parte IV

 

¨SEGUNDA RONDA: UN TIRO DE GRACIA PARA LA DEMOCRACIA¨


 

            En el sistema capitalista perfecto a escala en que se quiere convertir Costa Rica, la democracia tiene la utilidad de un preservativo. Se usa y se deshecha cada cuatro años y evita que los ciudadanos tengan verdadero acceso al poder. Una vez tirada a la basura, después de su uso, el sistema vuelve a la carga en su labor de desarmar el estado de bienestar social que le costó sangre, sudor y lágrimas a trabajadores que hace décadas pudieron doblarle el brazo a las clases poderosas para garantizar los derechos de salud, educación y seguridad igualitarios para todo el pueblo. Ahora, el sistema se quita la democracia y la desecha cuando vuelven a estar los dueños de la finca a cargo, y se preocupa apenas por mantener la línea de ignorancia e incultura crecientes, para una vez pasados otros cuatro años, poder seducir, engañar y violar de nuevo a la ciudadanía, con el pretexto del uso de una democracia que, según ellos, garantiza que las calamidades van a disminuir y la carrera hacia el precipicio no existe.

           

            Al final, el ganador de la primera ronda electoral fue el elegido por el pueblo: ninguno. Ninguno es en quien la gente tiene confianza, ninguno es el que tiene capacidad, ninguno es el que no va a hacer daño. Ninguno es el candidato estrella de los oligarcas de este barrio y es el que representa el triunfo del conformismo, el miedo, el serrucho, la queja eterna sin acción y el brochazo a los ricos y a los extranjeros del tico promedio. Como ninguno es una opción muy abstracta para un pueblo que no lee, los dueños de la finca le tiran la carnada de dos candidatos para escoger cual es el que le parece más simpático a todo el hato y que sea el pararrayos para los próximos cuatro años. Los dos candidatos que lleguen son nada más dos diferentes salsas para cocinar el bistec de la res-pública que seguirán devorando las élites como lo ha sido desde hace años. El pueblo ha sido lo suficientemente castrado para evitar elegir, en lugar de un adobo a la carne, una opción a no volver a caer en el sartén.

 

Así entonces, tenemos en segunda ronda, otra vez a dos impresentables que harían menos daño si tuvieran por lo menos un mililitro de vergüenza y permanecieran reptando bajo las piedras donde deberían estar. Dos ejemplares nocivos son los que el ganado de esta finca ha llevado a ser los posibles felpudos de la oligarquía que manda en este territorio. Ambos compiten en desastres tanto personales, como de competencia, para asumir el importante puesto de ejecutores de las órdenes de las élites para que el pueblo siga tragando cable. En las elecciones pasadas, cuando hubo segunda ronda, muchos con todo el asco del mundo fuimos a apoyar al partido de gobierno aunque dejaba mucho que desear, contra la amenaza de un gobierno fundamentalista cristiano ultraderechista y con valores intelectuales al nivel de los protozooarios. Gracias a esto, el Pac siguió en el poder y gozamos de un gobierno de mierda, que eso sí, pudo ser peor bajo la pandereta de Fabricio.

Pero ahora las dos opciones presentan una posibilidad tan nefasta o peor de lo que hemos venido padeciendo como país. Por un lado, un estafador de largo colmillo y currículum de terror, regresa con su lengua de plata a decirle a todos que esta vez si lo hará bien, que esta vez no robará, que esta vez no favorecerá a sus amigos, que esta vez no se cagará en el progreso del país entregando los transportes y la energía a los mafiosos que aún la manejan. El solo hecho de presentarse a elecciones le haría merecer de parte de un pueblo con dignidad e inteligencia, por lo menos darle la espalda, para no acabar con la imagen de pacifismo con la que de otros países nos ven.  El otro candidato, un arrogante desconocido, que viene agitando los valores del conservadurismo de vieja escuela, apoyado por una lectora de noticias que tuvo sus años de fama en la televisión y el pueblo sencillo la confundió con alguien con criterio. Viene fascinando a la ciudadanía con el truco de que va a acabar con la injusticia social de las pensiones de lujo, pero viene patrocinado por millonarios que han sido parte de la plataforma que sostuvo ese sistema.

 

Ya no hay nada más que hacer, uno de estos dos estará a cargo del poder ejecutivo a partir del próximo primero de mayo. Ninguno de los dos garantiza la supervivencia y la mejora de la educación pública y gratuita, ninguno de los dos sostendrá el sistema de salud al borde del colapso, sin terminar de venderlo a los negocios de oscar arias$, ninguno de los dos hará posible que exista justicia tributaria, porque los dos son peones de los oligarcas que siguen sacando del país sus riquezas hacia paraísos fiscales para no cooperar con el estado del que formamos parte, pero que ellos parasitan desde hace generaciones.

 

Queda demás decir, de mi parte, como creyente de que la única opción que puede salvar a la humanidad está a la izquierda; que si en las elecciones de la segunda vuelta no se considera que el candidato vencido sea exiliado del país, no tiene ningún sentido ir a votar.

 

Voten por quien voten, la suerte está echada.  

 

No se quejen, de lo que viene.